Polonia es un país que se sorprende. Generalmente pensamos que está todavía retrasada respecto de la UE y la vemos como un estado casi tercermundista, pero no es así, para nada, es un país que se moderniza a pasos agigantados, en algunos aspectos más adelantado que Italia incluso. Un país en el que aunque parezca mentira hay mucho turismo, sobre todo Cracovia (la ciudad donde llegamos con el avión) debido a la belleza de sus ciudades y a la hospitalidad de su gente, un país que deberíais poner en vuestra hoja de ruta. A parte de Cracovia también visitamos Katowice, Varsovia y el campo de exterminio de Auschwitz
Pero paso a contar nuestro viaje a Polonia.
La primera aventura comienza en el avión, y es que fueron increíbles las turbulencias que sufrimos, yo creía que me quedaba allí, fue como montar en el “Dragon Kahn” de manera gratuita, pero con mucho más miedo seguro. El avión daba unos botes impresionantes, casi de caída libre, un susto, baje del avión blanco.
Pero rápidamente se me quitó la ansiedad y es que si yo estaba blanco mas blanca estaba Cracovia,estaba llena de nieve y nevaba todavía más, los dos primeros días de viaje fueron así, todo el día nevando, en cambio no hacia mucho frió quizás porque yo no lo sentía ya que iba muy, muy abrigado. Lo pasamos en grande, la nieve da mucho juego, no paraban las guerras de bolas allá por donde íbamos, parecíamos niños de 5 años, jejeje. Pronto nos dimos cuenta de que con la nieve no todo es pasarlo bien, me refiero a que si juegas durante mucho tiempo en la nieve con el calzado apropiado te acabas empapando los pies y creedme no es nada cómodo andar por Polonia con los pies empapados. La solución de algunos fue comprarse unas botas, las de otros fue la siguiente…
…si señor, bolsas en los pies, jajaja, mis zapatos gracias a Dios aguantaron y no me hicieron falta ninguno de los dos remedios, con un calcetín doble fue suficiente.
Después de dos días en Cracovia (Krakow) nos acercamos en tren hasta Katowice, ciudad que está a una hora y media en tren hacia el oeste desde Cracovia. Allí hace el Erasmus Migui, un aMigo gallego de Fede y hasta allí fuimos a darle por saco y quedarnos a dormir dos noches en su residencia, también se vino Nano que estudia en Lodz, imaginaos 9 personas en dos habitaciones de la resi, un casino (follón en italiano) tremendo.
El día siguiente de llegar a Katowice hicimos la visita a Auschwitz por la mañana, fue una mañana dura porque lo que se ve allí no es agradable de ver, pero estuvo muy bien porque hay que conocerlo todo en esta vida y el campo de exterminio de Auschwitz-Birkeaw impresiona mucho.
Por la tarde noche fuimos a comer al JAZZ CLUB ya en Katowice y nos pegamos un atracón de lujo en un garito donde nos ponían música Jazz por tan solo 40 zloty unos 15 euros piwo (cerveza en polaco) incluido. Por la noche salimos a un discotecón y ya no os cuento lo acontecido a la mañana siguiente, jejeje
Bueno dejo aquí el primer capitulo del viaje a Polonia, próximamente en vuestro ordenador la segunda entrega.Alvarete.
